El año 2022 marcó un inquietante incremento del 25.2% en casos de violencia familiar, revelando una triste realidad en las estadísticas penales mexicanas. Sin embargo, los datos arrojan también una compleja panorámica delictiva, resaltando la presencia de crímenes como el robo y delitos contra la salud.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) presentó un análisis exhaustivo sobre las causas penales ingresadas al Poder Judicial durante el año pasado. En este informe, resalta que la violencia familiar se erigió como el delito más recurrente, representando un preocupante 16.6% del total de casos, evidenciando un impactante aumento del 25.2% respecto a 2021.

Este incremento se tradujo en un registro de 280,616 delitos en causas penales, siendo el 97.7% de estos cometidos por adultos y el 2.3% por adolescentes, reflejando un aumento general del 8.9% en comparación con el año anterior.

Asimismo, el reporte detalla que 290,929 personas fueron procesadas e imputadas, destacando que el 79.9% fueron hombres y el 11% mujeres, lo que supone un aumento significativo del 14.3% en mujeres y del 9.6% en hombres en comparación con 2021.

Las entidades federativas de Baja California y la Ciudad de México encabezaron el número de crímenes en el sistema de adultos, con 30,767 y 30,130 casos, respectivamente. En cuanto a la justicia para adolescentes, Chihuahua registró la mayor cantidad con 958 casos.

Junto a la violencia familiar, los delitos de robo y contra la salud también marcaron presencia en las estadísticas. La Ciudad de México y el Estado de México concentraron el 24.4% de los asuntos ingresados, evidenciando la complejidad y diversidad del panorama delictivo.

Es importante destacar que del total de personas imputadas, el 85.2% fueron vinculadas a proceso, mostrando un aumento sustancial del 28.6% en comparación con el año anterior.

En el Sistema Penal Acusatorio, Hidalgo, Sonora y Nayarit destacaron por presentar el mayor porcentaje de vinculaciones a proceso, mientras que Tabasco, Aguascalientes y Tlaxcala registraron las menores cantidades.

Estos datos, más allá de revelar cifras impactantes, llaman a una reflexión profunda sobre la problemática de la violencia familiar y los retos que presenta el sistema de justicia penal en México. Las cifras no solo reflejan la magnitud de los delitos, sino que también exponen la urgente necesidad de medidas efectivas para abordar estos problemas.