Desde julio de 2020, Sídney se convirtió en la primera ciudad que funciona con energía 100% renovable. La electricidad proviene de instalaciones de la empresa Flow Power que generan energía por medio de la radiación solar y el viento.

Gracias a este cambio energético, Sídney ahorrará cerca de 360,000 dólares al año y reducirá sus emisiones de CO2 en aproximadamente 20,000 toneladas anuales.

“Las ciudades son responsables del 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero en todo el mundo. Si queremos reducir las emisiones y hacer crecer el sector de la energía verde, debemos hacer una transición urgente a la energía renovable”, señala Clover Moore, alcaldesa de Sídney.

Sídney se mantiene como neutral en carbono desde el año 2007 y tiene el objetivo de reducir sus emisiones de carbono para 2030; sin embargo, es probable que esta meta se logre antes de lo planeado gracias a esta nueva implementación.

Desde ahora la ciudad más emblemática de Australia, Sídney, será no sólo famosa por su Ópera, sino también por ser la primera ciudad funcionando con energía completamente renovable.