El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha desatado una polémica internacional al acusar a Israel de cometer un genocidio contra civiles palestinos en la franja de Gaza. Durante su intervención en la cumbre anual de la Unión Africana en Adis Abeba, Etiopía, Lula comparó las acciones israelíes con la campaña de Adolf Hitler para exterminar a los judíos.
Estas declaraciones provocaron una respuesta enérgica por parte del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien las calificó de vergonzosas y graves. Netanyahu anunció la convocatoria del embajador brasileño en Israel en protesta por los comentarios de Lula, afirmando que trivializan el Holocausto.
En contrapartida, el movimiento Hamás respaldó las palabras de Lula, considerándolas una descripción precisa de la situación en Gaza. Hamás denunció el apoyo de Estados Unidos a Israel en el conflicto y celebró que una figura influyente como Lula haya tomado una postura tan contundente.
La tensión diplomática entre Brasil e Israel se agrava con estas declaraciones, mientras que la comunidad internacional observa con atención el desarrollo de la situación en Gaza.