Pequeña crónica de una destitución anunciada

Con 25 votos a favor y once en contra, el auditor Superior de Michoacán (ASM), Miguel Ángel Aguirre Abellaneda, fue removido de su cargo este jueves 25 de mayo en sesión extraordinaria del Congreso  local

Acento News

 

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Antes de la Caída de Tenochtitlán un rayo cayó en el Templo Mayor, una mujer gritaba para clamar por sus hijos, apareció un ave con dos cabezas.

La tarde del jueves 25 de mayo una lluvia torrencial se presentó durante cinco minutos, el partido de las Chivas/ Tigres iba 0 a 0 y “las cámaras del Aeropuerto de Cairns, Australia, captaron el momento preciso en el que un meteorito cruzó la atmósfera y por la fricción se calentó y comenzó a desintegrarse, dejando una estela de gases brillantes de color verde”. Los presagios no parecían estar del lado del auditor Miguel Ángel Aguirre Abellaneda, que enfrentaba un proceso de destitución por presunta corrupción.

En Palacio Legislativo, el diputado Torreblanca lanzaba risotadas semejantes a las de un ogro; los legisladores de la bancada del PRD permanecían agachados, en sus curules; los de Morena y el PAN hablaban entre sí.

Una mujer, ante las miradas absortas de la afición general, descendía las escaleras del Congreso, gritando: “Hay un amparo, hay un amparo, una suspensión”. El ocaso de la era Silvano Aureoles parecía cernirse sobre las cabezas de los pocos seguidores que aún le quedaban. Minuto 26’, la final de ida del futbol mexicano seguía 0-0.

A las ocho y 27 de la noche le indicaron a la presidenta de la legislatura sobre el quórum de 21 diputados para iniciar la sesión extraordinaria. El único punto: “Dictamen con Proyecto de Decreto por el que se remueve de su cargo al Titular de la Auditoría Superior de Michoacán, elaborado por la Comisión Inspectora de la Auditoría Superior de Michoacán”.

Eréndira Isauro, como si fuera la integrante de un grupo experimental de teatro amateur, comenzó la lectura de las 32 páginas del decreto. No pensó allegarse un vaso de agua antes de hacerlo. “Auditoria 2020”… el auditor, al emitir órdenes de fiscalización sin fundamentación, violenta preceptos legales.  La inobservancia del primer artículo de la ley de fiscalización… Fidel Calderón continuaba carcajeándose.

 

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Informaron sobre la existencia de un puesto de tacos en el patio. Los reporteros y asistentes de los parlamentarios, et. al., corrieron a formarse. Nadie le prestaba la más mínima atención a la recitación del decreto: Fiscalizar recursos de la Auditoría Superior de la Federación. Nadie parecía entender nada del documento. Unos le preguntaban a otros de qué iba la redacción. Minuto 35’, Chivas 0, Tigres 0, par de roscas.

Dos campechanos, una quesadilla de pastor. Sólo hay quesadillas, son lo más difícil, entonces las sacamos rápido. A través de las redes sociales, unos seguían la sesión en sus teléfonos y luego le daban una mordida a sus democráticos alimentos. Daños irreparables al no tener competencia… violación del principio de legalidad, el auditor carece de atribuciones. Carraspeaba la lectora. Se debía haber servido un vaso de agua.

A las 9 de la noche la persona que le llevaba la prensa al auditor traspuso el patio del Palacio Legislativo. El auditor brillaba por su ausencia. Medio tiempo en Monterrey. Alguna gente adepta a Silvano permaneció afuera del recinto sobre la avenida Madero, antigua Calle Real.

Correr un medio maratón no es tan simple, no puedes organizarlo así porque así porque tendrías que cerrar la circulación de la avenida. Déjame pregunto en el municipio a ver si tienen permiso de organizarlo. 88 auditorías en vez de 86. A últimas fechas, quieren hacer maratones cada fin de semana, le explicaba el periodista a otro comensal.

Al regresar al pleno, la vocal Brenda Fraga ya ni siquiera estaba ahí, en la lectura. Mira, les están dando el amparo, dijo uno, ahí donde por la mañana habían anunciado la creación del Premio al Mérito Periodístico “Manuel Buendía”, confiriendo 50 UMAs al ganador. ¿Cuánto es una UMA? 103 pesos. 103 por 50. ¿Cinco mil 150 pesos? No mames, exclamó un reportero.

Minuto 67′, 0-0. Posible daño por 223 millones… ineficiencias. ¿Qué dice el documento? Que no le dejaron tiempo para defenderse. Página 19. Se le está acabando la saliva. Debe apegarse al principio de legalidad… Auditar recursos federales sin que su ordenamiento lo faculte, y sin que exista convenio de colaboración para auditar recursos federales con la ASF… no confiabilidad. Cuenta Pública 2021. Actividad irregular sistemática. Violenta el artículo 135 de la Constitución Mexicana.

El auditor especial de normatividad se hará cargo en tanto nombren un nuevo auditor. Todos seguían sin escuchar nada, todos en franca plática, bebiendo los refrescos que habían recogido a las afueras del pleno. Sólo le faltaba un circulito al brazo de la silla para estar en una especie de asiento de sala cinematográfica.

 

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El partido finalizó 0-0. A las diez de la noche la gente se interesó por lo que pasaba en el pleno. Nadie hizo uso de la voz al terminar la lectura. Empezaron a votar. 1-0, 1-1, 1-2, 2-2, 3-2, 4-2, 4-3, 4-4, 5-4, 6-4, et cetera. El público contuvo la respiración. 9-4. 11-4. 12-5. 12-6, 12-7. Se precisaba de dos terceras partes, mayoría calificada, para que la iniciativa se aprobara. Al final, el marcador quedó 25-11 a favor de la remoción. Sin abstenciones. Unos y otros se miraban, recelosos. ¿Si obtuvo los votos necesarios la iniciativa?

Ni siquiera los diputados que se opusieron al decreto de remoción de Aguirre Abellaneda hablaron. Al final, la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso dijo: Aprobado en lo general. Se remueve de su cargo a Miguel Ángel Aguirre Abellaneda. La legisladora Seyra Anahí Alemán Sierra se reservó aprobar el decreto en lo particular.

Hizo una denuncia penal. Hechos falsos. Solicitar información que no es de su incumbencia. Corrupción y ejercicio ilícito de la función pública. Denuncia administrativa y civil. Se destituye al C. Miguel Ángel Aguirre Abellaneda. Delito por hechos de corrupción.

Tan pronto como todos habían llegado al recinto, así se fueron. La sala se vació en unos cuantos minutos. Marco Polo Aguirre, Adriana Hernández, Juan Carlos Barragán y Torreblanca dieron sendas sendas entrevistas. No hubo júbilo, no hubo desconsuelo. Unos y otros se fueron con su bajo perfil.

Un señor afuera del Congreso, quien aseguró venir de Guadalajara e ir a Ciudad Hidalgo, se acercó a pedir dinero. Un diputado le dijo que no traía nada. Este reportero gonzo le dio diez pesos. La legisladora del vestido verde fue conducida hasta su coche, en una suerte de valet parking a media avenida. Un Audi.

A lo largo de la antigua Calle Real los carriles se abrían, con la luz verde del semáforo. El viento seguramente  despeinaba los caireles de la legisladora a través de la ventana.