Mujeres que siembran futuro: el poder femenino detrás del campo mexicano

“Las mujeres rurales no somos víctimas pasivas, somos protagonistas de la lucha por la vida, la dignidad y la justicia”, afirmó Ale Anguiano, secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres Michoacanas (Seimujer), durante el Encuentro de Mujeres Forestales realizado en Michoacán.

En su participación, Anguiano destacó que la historia del campo mexicano también es la historia de las mujeres, quienes han sostenido por generaciones la vida comunitaria, el cuidado del agua, la siembra y la resistencia frente a las desigualdades. “Sin nosotras, el campo no camina, no florece, no resiste”, subrayó.

La funcionaria señaló que la justicia ambiental no puede existir sin justicia de género, y que la lucha por los recursos naturales debe reconocer la voz, los saberes y las decisiones de las mujeres rurales. “La soberanía alimentaria tiene rostro de mujer: rostro moreno, curtido por el sol, por el trabajo digno, por el amor a la tierra”, expresó.

Anguiano enfatizó que muchas mujeres michoacanas enfrentan violencia, criminalización y machismo dentro y fuera de sus comunidades, pero que, a pesar de ello, continúan organizadas, resistiendo y defendiendo la vida en los bosques, las milpas y los territorios.

“Es tiempo de dejar de vernos como beneficiarias y empezar a reconocernos como sujetas políticas, arquitectas de futuros posibles, donde vivir en el campo no sea sinónimo de pobreza ni de abandono, sino de dignidad y equilibrio con la naturaleza”, concluyó.