El Programa Institucional de Seguridad Universitaria (PISU) no menciona operativos sorpresa dentro del campus universitario ni en sus dependencias sin una amenaza evidente o solicitud de las autoridades universitarias 

Acento News

La presencia de policías e incluso elementos castrenses al interior de la Preparatoria 2 de la Universidad Michoacana es una violación a la autonomía universitaria, pues de acuerdo a los lineamientos de la institución, los elementos de seguridad sólo pueden ingresar en situaciones específicas.

Fue la tarde de este 16 de mayo cuando la Guardia Civil, integrantes de la Fiscalía General del Estado y elementos vestidos como militares, ingresaron a la Preparatoria 2 de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), como parte de un “operativo” que empezaría a realizarse de manera aleatoria en distintas instituciones de educación superior y media superior de la máxima casa de estudios de la entidad.

“Se llevó a cabo un operativo en una de las instituciones dependientes de la Universidad Michoacana, y se trata del primero de otros más que se realizarán de manera aleatoria, y forma parte de la estrategia que llevan a cabo las fuerzas del orden para disuadir cualquier conducta que vaya en contra de la ley”, expresó vía un comunicado la UMSNH tras el ingreso.

Y agregó la institución universitaria: “La autoridad educativa fue enterada del operativo minutos antes de que se llevara a cabo, y esto fue con la finalidad de salvaguardar que el mismo se llevara a cabo con éxito. En ningún momento se ha ejercido violencia, ni resistencias… La presencia de los elementos, apoyados por binomios caninos, fue con la finalidad de revisar el espacio educativo, y esto no significa que se violente la autonomía, pues esta se encuentra totalmente garantizada.

Según declaraciones de la propia universidad, no fue sino minutos antes que la Máxima Casa de Estudios se enteró de que policías y militares entrarían a realizar un operativo.

De acuerdo al Programa Institucional de Seguridad Universitaria (PISU), realizado en 2011, cuando fungía como rector Salvador Jara Guerrero, los operativos de corporaciones policiales municipales, estatales o federales que pueden irrumpir en el campus deben estar justificados. No se menciona al ejército.

En ese sentido, como se expresa en la página 30, la policía podrá irrumpir en el campus por “casos de amenazas de artefacto explosivo, narcotráfico, secuestro, entre otros”.

No obstante, la figura de operativos aleatorios sin ninguna denuncia de por medio no se encuentra en el PISU, mucho menos a cargo de militares, lo que contrasta con la revisión de mochilas que se efectuó a los jóvenes de la preparatoria, lo cual negó la UMSNH más tarde, pese al material fotográfico: “Se aclara que no se revisaron las mochilas de las y los menores de edad, ni tampoco hubo inspección física a los mismos”.

Dicha irrupción militar, según los lineamientos, pone en entredicho la autonomía universitaria, con lo que inicia un nuevo capítulo en la UMSNH de la rectora Yarabí Ávila González, pues no fue sino en 1966, durante el conflicto estudiantil, cuando los elementos castrenses habían irrumpido en un recinto universitario.