Michoacán encendió el espíritu del Día de Muertos con una serie de actividades que celebran la tradición, la cultura y la cosmovisión purépecha que dan identidad al estado.
En Cápula comenzó la tradicional Feria de la Catrina, donde artesanos y artistas locales exhiben su talento en barro y pintura, mientras que en la zona lacustre arrancó el espectáculo de los Manantiales de Urandén, que reunió a más de cinco mil personas. El desfile de 34 canoas iluminadas mostró 18 escenas que retratan las costumbres y leyendas de la región, en un homenaje al alma de las comunidades ribereñas.
Las autoridades locales llamaron a los visitantes a vivir esta festividad con respeto: evitar caminar sobre las tumbas, no fumar, no llevar mascotas, no tirar basura y pedir permiso antes de tomar fotografías, para preservar el sentido espiritual de las velaciones.
Como parte de las actividades, se imparten talleres de cocina tradicional, elaboración artesanal y armado de altares, con el propósito de acercar al turismo al simbolismo detrás de cada elemento: desde la cosecha de la flor de cempasúchil hasta la preparación de las ofrendas.
Además, Michoacán será el estado invitado en el Festival de Vida y Muerte de Xcaret, que se realizará del 30 de octubre al 2 de noviembre. Ahí, 258 artesanos, cocineras tradicionales y artistas compartirán con más de 50 mil visitantes la esencia de una de las celebraciones más representativas de México.cult








