En medio del conflicto en curso entre Israel y Palestina, México ha emitido una declaración oficial en la que condena la violencia y aboga por la paz.
El presidente Andrés Manuel López Obrador enfatizó en una conferencia mañanera que México no desea la guerra y está a favor de la paz.
El Gobierno mexicano ha reconocido el derecho a la legítima defensa de Israel, pero al mismo tiempo condena el uso de la fuerza contra civiles en Oriente Próximo. Además, ha anunciado la realización de dos vuelos humanitarios para repatriar a cientos de mexicanos que se encontraban varados debido al estallido de la violencia en la región.
La respuesta oficial de México llegó después de dos días de silencio y atajó las críticas sobre la posición diplomática del país ante la guerra. México favorece una solución de dos Estados que permita la coexistencia pacífica de Israel y Palestina.
Esta solución integral busca abordar las legítimas preocupaciones de seguridad de Israel y asegurar la viabilidad política y económica de un estado palestino, todo dentro de fronteras seguras y reconocidas internacionalmente.
El presidente López Obrador subrayó que la posición de México se ajusta a los principios de política exterior establecidos en la Constitución, como la no intervención, el derecho a la autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de controversias.
