Los nulos resultados que registró la administración de Raúl Morón Orozco en materia de seguridad y obra pública costaron a Morena perder la capital michoacana en las pasadas elecciones.

El ahora precandidato al Senado de la República, tendrá que cargar con los pendientes y las promesas incumplidas que heredó en la ciudad de Morelia, y que en su momento le costó al partido que representa perder una de las capitales más importantes del país.

Una vez que pidió licencia se dio a conocer que Raúl Morón dejaba su administración con un pendiente importante en materia de seguridad, hecho que fue confirmado por el resultado de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública y Urbana (ENSU), que reveló que, hasta junio de 2021, el 67.9% de la población mayor de 18 años se sintió insegura en Morelia.

Además, el proyecto “Juntos Iluminamos Morelia” que se tenía previsto concretar en septiembre del 2019, aún registraba rezago en el 2020 y 2021; sin embargo, la administración en su tercer informe de gobierno aseguró que se instalaron 76 mil lámparas, aunque el mal funcionamiento de éstas fue un reclamo recurrente hasta el final de su mandato por parte de habitantes en diversas colonias de la ciudad.

Otro de los pendientes fue el refugio para mujeres víctimas de violencia, bajo la construcción de la Secretaría de Urbanismo y Obras Públicas (SUOP) mediante la gestión del Instituto Municipal de la Mujer para la Igualdad Sustantiva (Imujeris), el cual no fue entregado.

Finalmente, el propio Raúl Morón reconoció que en la rehabilitación de vialidades su administración dejaba bastantes pendientes, muestra de lo anterior es que de las 11 mil vías que hay en Morelia, la mayoría se encuentran dañadas.