José Antonio Cruz Medina, un perfil curtido en inteligencia y operaciones tácticas, asumió este 16 de noviembre la Secretaría de Seguridad Pública en un relevo que busca acelerar la coordinación con la Federación y afinar la estrategia que impulsa el gobierno federal en la entidad.
Cruz Medina viene de la Vicefiscalía de la Fiscalía General del Estado, donde encabezó áreas clave de análisis e inteligencia. Su llegada apunta a reforzar el trabajo conjunto con autoridades federales y a meter presión en el combate a la delincuencia y la reducción de la violencia.
Con más de 20 años en operaciones, investigación y tácticas especializadas, no es un desconocido en el terreno. En 2022 ya había pasado por la propia SSP como subsecretario de Investigación Especializada. También dirigió operaciones técnicas y tácticas en la extinta Policía Federal, donde participó en investigaciones contra grupos criminales de alto impacto y en la captura de objetivos prioritarios.
Su hoja de vida incluye cargos en Baja California, la Guardia Nacional y áreas especializadas como Antisecuestro. Ha recibido menciones honoríficas, certificaciones en inteligencia táctica y formación internacional con el FBI, academias europeas y cuerpos policiales de Colombia.
Además, ha representado a México en foros internacionales sobre trata de personas, drogas sintéticas y tráfico de armas, lo que suma una visión más amplia del panorama criminal.
Con su arribo a la SSP, se abre una etapa en la que se espera mayor articulación operativa y una estrategia más afinada para encarar la violencia en Michoacán. El reto es enorme, pero el nuevo mando llega con experiencia suficiente para intentar mover la aguja.








