Investigación revela presunto desvío de fondos por Alfonso Martínez Alcázar en Morelia

Un reportaje reciente ha sacado a la luz un presunto esquema de desvío de recursos públicos dirigido por Alfonso Martínez Alcázar, candidato a la reelección en la alcaldía de Morelia. Según la investigación, entre 2022 y 2024 se desviaron más de 348 millones de pesos hacia empresas fantasma bajo el pretexto de pagar servicios de “asesorías”. Las compañías involucradas, Portare Servicios y Soluciones y Grupo Pro Gler, carecen de experiencia en asesoría gubernamental, lo que ha generado serias dudas sobre la legitimidad de estos pagos.

El gasto exorbitante en asesorías supera significativamente los presupuestos asignados a sectores vitales como la agricultura, la cultura y el desarrollo urbano del municipio, lo que ha levantado cuestionamientos sobre las verdaderas prioridades de la administración de Martínez Alcázar. Aunado a esto, el proceso de contratación carece de transparencia, ya que ninguna de las facturas se emitió a través de licitaciones públicas y no existe registro de estas transacciones en el Portal de Transparencia del Ayuntamiento.

Una de las áreas más afectadas por esta situación es la auditoría de entrega-recepción, función que debería ser realizada por la Contraloría municipal, pero que aparentemente fue externalizada a empresas privadas sin justificación clara. Este manejo cuestionable de recursos públicos sugiere una posible falta de supervisión y abuso de poder dentro de la administración municipal.

Adicionalmente, la investigación descubrió que uno de los representantes de las empresas contratadas también es propietario de otra compañía beneficiada, lo que incrementa las sospechas sobre la legalidad de estas transacciones. Los pagos a Portare y Pro Gler fueron de 119 y 118 millones de pesos respectivamente, mientras que otra empresa recibió más de 34 millones de pesos. Soluciones de Negocios Gomo, otra empresa involucrada, obtuvo más de 76 millones de pesos.

En conclusión, la investigación apunta a un patrón alarmante de malversación de recursos públicos y falta de transparencia en la gestión de Alfonso Martínez Alcázar.