El exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, presentó sus dos últimas declaraciones patrimoniales hasta octubre pasado. Un año después de terminada su administración, llamó la atención de las autoridades michoacanas que en su declaración aseguraba no tener inmuebles, terrenos o vehículos.
Sin embargo, sí declaró que debe un crédito hipotecario por tres millones de pesos y recientemente declaró, en un evento público, que tenía dos casas.
Este jueves, Aureoles fue inhabilitado por la Contraloría estatal porque no presentó, durante el tiempo que marca la ley, el reporte de todos sus bienes. Por ello, la autoridad le dicta que no podrá “desempeñar empleos, cargos o comisiones en el servicio público” y tampoco podrá “participar en adquisiciones, arrendamientos, servicios u obras públicas”, durante 11 meses.
También, la Contraloría de Michoacánaseguró que el exmandatario y otros funcionarios de su administración ya fueron denunciados por otras faltas y delitos.