En febrero pasado, Martha Angélica Ojeda, excolaboradora y expareja sentimental de Gerardo Fernández Noroña, interpuso una denuncia contra el diputado petista, a quien acusó de “simulador, violento, mentiroso y vulgar ambicioso”.
Y ahora que el legislador petista busca la presidencia de la Mesa Directiva en la Cámara de Diputados, la mujer exige avances sobre la demanda que presentó contra su expareja por corrupción, lavado de dinero y delincuencia organizada. Las imputaciones, dijo, son motivo para que Fernández Noroña no ocupe ese cargo.
La demandante pidió ayuda a la diputada de Morena, Lorena Villavicencio, para que sea ella quien solicite a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), a la Fiscalía General de la República (FGR) y a la Auditoría Superior de la Federación (ASF), que den a conocer los avances de la denuncia contra el vicecoordinador del grupo parlamentario del Partido del Trabajo (PT).
De acuerdo con Ojeda, las aspiraciones de Fernández Noroña a la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados son un mensaje negativo a la ciudadanía por parte de la Cuarta Transformación, porque –subrayó– implicaría un acto de impunidad y corrupción, “cuando el propósito de transformación del gobierno federal se dirige, precisamente, a combatir la impunidad, el tráfico de influencias y la corrupción”.
La primera denuncia, dijo, la presentó el 17 de febrero ante la ASF, acusando a Fernández Noroña de corrupción, evasión fiscal, ejercicio con recursos de procedencia ilícita, lavado de dinero y delincuencia organizada.
Argumentó que los viajes al interior del país y al extranjero realizados por el legislador, al parecer financiados por terceras personas, pudieron ser pagados con recursos de procedencia ilícita, porque no fueron declarados fiscalmente ni como parte de su agenda legislativa.
Sobre los “aviadores” –personas que cobran un sueldo sin presentarse a trabajar– que supuestamente Fernández Noroña mantiene en su oficina en la Cámara de Diputados, Ojeda destacó que son hermanos y sobrinos, y no se sabe con exactitud cuál es el origen de sus remuneraciones.
Añadió que interpuso una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), particularmente contra Mónica Fernández Noroña, hermana del denunciado, porque “se hacía pasar como responsable de su oficina sin contar con ningún tipo de nombramiento ni registro por parte de la Cámara de Diputados”.
Entre las pruebas que entregó Ojeda como parte de la denuncia destaca un video fechado del 18 de febrero de 2020, donde Gerardo Fernández Noroña –abundó– admite haber recibido “apoyos materiales y económicos de terceros y acepta viajar con recursos que le pagan simpatizantes, sin aclarar su vínculo con ellos ni el origen de los recursos”.
Aquel 19 de febrero, mismo día en que interpuso la denuncia, Ojeda y Martín Nolasco, también excolaborador de Fernández Noroña, se brincaron el área destinada a la prensa y entraron al pleno del salón de sesiones, en San Lázaro, portando una manta con el siguiente mensaje: “Noroña, vives del pueblo, traicionas al pueblo. Simulador, violento, mentiroso y vulgar ambicioso”. La sesión se interrumpió hasta que los manifestantes fueron sacados del lugar por elementos de seguridad.
La mujer aseguró que conoce a Fernández Noroña desde hace 28 años y que fue su pareja sentimental. Ahora lo acusa de nepotismo por tener a cinco familiares trabajando en su oficina, y cuestiona el origen de los recursos utilizados por el legislador para viajar.
“Le señalamos que tenía a la mitad de su familia cobrando y trabajando en la Cámara de Diputados. ¡Eso es nepotismo!”, indicó.
“¡Es mentira!”
Fernández Noroña no negó que tuviera a familiares colaborando con él en su oficina, pero aseguró que no cobraban.
“¡Es mentira, hombre! Es público que la gente que me invita a los recorridos es quien financia mis desplazamientos”, afirmó en su momento, y adelantó que no procedería legalmente en contra de Ojeda, pero sí lo haría con Nolasco, a quien dijo que demandaría la entrega de 90 mil pesos por el uso de su canal en Youtube.
“No haré absolutamente nada porque fue mi mujer”, remarcó, y lamentó que, con 30 años de conocerla, ahora diga que supuestamente está siendo financiado por empresas privadas.
“El caso de Martha Angélica, mi exmujer, trabajó conmigo, yo la defendí de cobardes acusaciones y hoy se presta al golpeteo en mi contra. ¡Es lamentable!”, exclamó.
Consideró que esa actitud respondía a que no le renovó el contrato, por lo que Ojeda destruyó sus archivos y expedientes, y arrojó café a las computadoras para descomponerlas, pero aun con todo eso, Fernández Noroña manifestó que no procedería en su contra, “por más cosas que diga. No procederé porque fue mi mujer”, insistió, y la acusó de pelearse con otra excolaboradora “muy guapa”.
En 2009-2012 Martha Angélica Ojeda fue secretaria de Noroña, pero se le conocía como la “diputada 501”, porque siempre estaba sentada en su curul.