El precio del oro ha alcanzado un nuevo máximo histórico, superando los 2 mil 150 dólares por onza, en medio de la incertidumbre económica global. Esta alza coincide con la intervención del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, en el Congreso, donde advirtió que la lucha contra la inflación aún no está completa.

El metal dorado alcanzó los 2 mil 149.25 dólares por onza, según datos de Bloomberg, antes de la comparecencia de Powell ante la Cámara de Representantes. Aunque posteriormente experimentó una leve disminución, llegando a los 2 mil 132 dólares por onza, luego se recuperó parcialmente, rondando los 2 mil 141 dólares.

La declaración de Powell sobre la continuación de la lucha contra la inflación ha reforzado la percepción de los inversores sobre la necesidad de activos considerados refugio, como el oro, en tiempos de incertidumbre económica.

Los analistas señalan que las compras realizadas por los bancos centrales, así como la sólida demanda en Asia, han contribuido al aumento del precio del oro. Esta tendencia sugiere que los inversores buscan protegerse contra la inflación y la volatilidad del mercado, encontrando en el oro una opción atractiva para preservar el valor de sus activos.