El Congreso de Durango aprobó este miércoles la Ley Nicole, una reforma que prohíbe las cirugías estéticas en menores de 18 años con el objetivo de proteger la integridad, la salud y la vida de niñas, niños y adolescentes. La iniciativa, impulsada por la diputada morenista Sandra Amaya Rosales, obtuvo 23 votos a favor.
La legislación establece que solo se permitirán procedimientos en menores cuando tengan fines médicos o reconstructivos, como en casos derivados de accidentes o enfermedades. Además, endurece las sanciones: contempla penas de 4 a 8 años de prisión para quienes realicen cirugías estéticas a menores y de 2 a 6 años para quienes ejerzan sin la preparación médica correspondiente.
La diputada Amaya celebró la aprobación al señalar que la reforma “cierra vacíos legales que permitían prácticas peligrosas” y obliga a denunciar cualquier procedimiento indebido.
La discusión surgió tras la muerte de Paloma Nicole, una adolescente de 14 años que falleció el pasado 20 de septiembre luego de someterse a tres cirugías estéticas realizadas por su padrastro —cirujano plástico— y su madre, quien participó sin contar con preparación médica. El caso generó indignación nacional y reabrió el debate sobre la regulación de estas intervenciones en menores.








