Crean maceta inteligente para poder comunicarnos con las plantas

El avance tecnológico está dando más sorpresas y ahora presentaron una nueva maceta inteligente que es capaz de dar a conocer los deseos de las plantas.

Este dispositivo electrónico puede traducir las emociones de las plantas en palabras para que así sus dueños sepan qué necesita su planta para poder mantenerse viva y sana.

El invento se llama LUA y la creó Mu Desing un reconocido despacho de diseño de la India que desde décadas ha trabajado con una estética y con una sensibilidad especial.

Además de hacer casas con fachadas minimalistas, ahora quieren profundizar en la posibilidad de darle voz a los que no la tienen, como las hermosas y muy silenciosas plantitas que llegan a nuestra vida y son parte de nuestra familia.

¿Cómo funciona?

Cuando adoptamos una planta hay muchas cosas que desconocemos acerca de ella. No todas necesitan la misma luz, la misma cantidad de agua o los mismos nutrientes para crecer.

En ese sentido, LUA es desde ya el aliado perfecto, ya que este dispositivo fue construido con 15 sensores diferentes que tienen la posibilidad de medir absolutamente todo lo que rodea a una especie vegetal, incluso la temperatura del suelo, su exposición a la luz, etc.

Además cuenta con un deposito de agua y es capaz de controlar la luz y la humedad.

Por su parte, las macetas inteligentes cuentan con un monitor digital que tras hacer sus cálculos expresa distintas emociones (muy parecidas a los símbolos del emoticom) y transmite información para poder remediar el problema de la planta.

Por si lo anterior fuera poco, LUA es también una aplicación vanguardista, que le permite a los usuarios monitorear desde cualquier lugar la salud de sus plantitas, configurar diversas opciones y recibir consejos oportunos para que nuestra amiga verde viva todo el tiempo que pueda.

Desde sed hasta felicidad extrema, estas macetas son sin duda el sueño de todos los entusiastas de las plantas y de todos los que saben que esos seres vegetales, que coexisten con nosotros, son algo más que un adorno. Son un organismo vivo que merece toda nuestra empatía, cuidado y amor.