Los habitantes del fraccionamiento Villas de Oriente, en la periferia de Morelia, enfrentan cada día largas filas, retrasos y malos tratos debido al monopolio de la Ruta Morada en el servicio de transporte.
A pesar de no contar con suficientes unidades para atender a la creciente población, la Ruta Morada impide que otras líneas de transporte entren en la zona. Los colonos se ven obligados a esperar hasta una hora para abordar una combi, y la desesperación por llegar a sus destinos genera empujones y conflictos entre pasajeros.
Hace cuatro años, la Ruta Morada bloqueó la entrada de otra línea de combis, la ruta negra, amenazando incluso con quemar sus unidades, según un vecino afectado.
Este problema, que refleja la falta de opciones de transporte en zonas alejadas, agrava el día a día de miles de personas en Villas de Oriente y otros fraccionamientos de la periferia.