El creciente flagelo del robo a hogares no da tregua a los morelianos, evidenciando un aumento del 14% durante los dos primeros años de la gestión de Alfonso Martínez Alcázar.
Según el informe del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se promedian 40 denuncias mensuales por robos domiciliarios, totalizando 382 casos hasta octubre.
Estos datos, alarmantes por sí mismos, adquieren mayor relevancia al compararlos con la administración anterior de Raúl Morón Orozco, que dejó un legado de más de 1000 casos en tres años. Sin embargo, la cifra real podría ser aún más preocupante debido a la subnotificación, ya que la falta de respuesta de la Policía Morelia desalienta a la mayoría de las víctimas de presentar querellas.
La inseguridad en el hogar se erige como un desafío persistente en Morelia, exigiendo respuestas efectivas tanto en el ámbito policial como en medidas preventivas para salvaguardar la tranquilidad de los residentes.