El presidente Andrés Manuel López Obrador ha anunciado su determinación de expropiar el proyecto de extracción de piedra caliza en Calica, propiedad de Vulcan Materials, debido a su impacto ambiental en la selva.

Si la empresa no acepta vender el terreno, se convertirá en una zona natural protegida, y se ofrecerá una indemnización de acuerdo con la ley. Aunque la empresa podría impugnar la decisión, el gobierno mexicano considera su derecho a proteger el territorio.

Previo a esta decisión, el presidente propuso a Vulcan Materials comprar el terreno para convertirlo en un complejo ecoturístico, con una oferta de 6 mil millones de pesos basada en un avalúo. Insistió en que pagar más sin un nuevo avalúo sería un acto de corrupción. En caso de expropiación, los 6 mil millones de pesos se depositarán en un juzgado para iniciar el proceso legal.

El Gobierno mexicano clausuró la minera el año pasado, acusándola de causar un desastre ecológico en Quintana Roo y de estar vinculada a las protestas contra el Tren Maya, un proyecto emblemático del presidente en la región.