La nueva directora regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe, Bibiana Aído, advirtió que los derechos de las mujeres podrían volver a cuestionarse en medio de crisis políticas, económicas o sociales, tal como anticipó Simone de Beauvoir. Su señalamiento llega tras la eliminación de los ministerios de la mujer en países como Argentina, Panamá y Ecuador, pese a que la región registró 3,897 feminicidios en 2023.
Aído subrayó que la desigualdad sigue marcando la vida de millones de mujeres y que la violencia política continúa siendo un obstáculo para su participación. Recordó que, desde que fue ministra de Igualdad en España, enfrentó agresiones normalizadas que hoy la región ha comenzado a identificar y atender con leyes pioneras.
Como prioridad, la funcionaria propone fortalecer agendas locales, atender las desigualdades interseccionales —particularmente en mujeres afro, indígenas y con discapacidades— y movilizar más recursos ante el desgaste del multilateralismo. Recalcó que la igualdad no es una lucha entre mujeres y hombres, sino contra un sistema que afecta a toda la sociedad.
Aído también llamó a involucrar activamente a los hombres, desmantelar narrativas que presentan al feminismo como una amenaza y reforzar alianzas intergeneracionales. Señaló que la violencia digital es uno de los desafíos más urgentes, pues hasta 95% de los deepfakes tienen por objetivo a mujeres y los ataques en redes afectan gravemente a niñas y jóvenes.
Finalmente, destacó la fuerza del movimiento feminista latinoamericano, capaz de impulsar cambios estructurales desde la movilización social, como lo hicieron campañas como Ni Una Menos o el movimiento de pañuelos verdes.








