El alcalde Alfonso Martínez ha priorizado la ampliación del patio de maniobras del tren por encima de su promesa de sacar el tren de la zona urbana. Esta acción se ve reflejada en la reciente inauguración del puente peatonal sobre la avenida Siervo de la Nación, cuyo diseño favorece la movilidad ferroviaria en detrimento de la comodidad y seguridad peatonal.

Los colonos de la zona han expresado su descontento al descubrir que tanto el paso vehicular como peatonal del puente han sido diseñados para facilitar las maniobras del tren, relegando las necesidades de los transeúntes y residentes locales. Esto se ve exacerbado por la extensión de casi 1 kilómetro de rampa que los peatones deben recorrer para cruzar un tramo de vía del tren que apenas alcanza los 20 metros.

Este enfoque en la infraestructura ferroviaria en detrimento de la movilidad y seguridad peatonal se interpreta como una falta de consideración hacia la comunidad y como una política urbana que privilegia los intereses industriales por encima de los ciudadanos.

Además, la falta de avances en la reubicación del patio de maniobras del tren hacia zonas periféricas refleja una desconexión entre las promesas de campaña y las acciones concretas de la administración municipal.